Ha llegado el día. España ya roza la Copa del Mundo. La selección busca la gloria ante Inglaterra en la final del Mundial de Australia y Nueva Zelanda. Las españolas se miden a las vigentes campeonas de Europa, un rival que las eliminó en los cuartos de final de la pasada Eurocopa y que solo ha perdido un partido desde que Sarina Wiegman ocupa el cargo de seleccionadora. Las de Jorge Vilda han llegado hasta la final después de recuperarse del batacazo ante Japón en el último encuentro de la fase de grupos, en el que fueron goleadas (4-0). España retornó con más fuerza para superar a Suiza en octavos de final (1-5), a Países Bajos en la prórroga de los cuartos (2-1) y a Suecia en semifinales (2-1). Para la final, Vilda ha optado por retirar a Alexia Putellas del once y darle la titularidad a Salma Paralluelo, determinante ante Suecia y Países Bajos a pesar de salir desde el banquillo. Mientras, Wiegman apuesta por su once habitual, el mismo que dispuso en cuartos y en semifinales, con Alessia Russo y Lauren Hemp liderando el ataque.