Demostrando que las Navidades son las fechas más familiares del año, una de las sagas más populares de nuestro país se ha reencontrado para celebrar juntos, y con una sonada ausencia, su tradicional comida de Navidad.
Tal y como se ha convertido ya en una tradición, Manolo Falcó y Amparo Corsini, marqueses de Castel-Moncayo, ejercieron de anfitriones en su madrileña residencia cercana al parque del Retiro. A primera hora de la mañana, la pareja y dos de sus tres hijos, Manuela y Mariana, disfrutaban de un tranquilo paseo con su mascota, antes de comenzar con los preparativos de la celebración familiar.
Una comida a la que no faltó la primera mujer del recordado marqués de Griñón, Jeannine Girod -madre de Manolo- ni su hija Xandra Falcó, que llegaba acompañada por sus tres hijas, Isabela, Camila y Bianca, fruto de su matrimonio con Jaime Carvajal Hoyos, fallecido en 2020 meses después que su padre.
Los últimos en llegar a la cumbre navideña de los Falcó fueron los marqueses de Cuba, Álvaro Falcó Chávarri e Isabelle Junot, que llevaba a su hija Phillipa, nacida el pasado 11 de junio, en brazos, y derrochando estilo con una blazer de estampado geométrico en tonos rojos, marrones y verdes, y un pantalón fluido en color chocolate.
Las grandes ausencias en esta ocasión, Tamara Falcó e Íñigo Onieva, que este año han viajado a Miami para celebrar las fiestas con Isabel Preysler y los hermanos que la socialité tiene por parte de madre: Chabeli, Julio José y Enrique Iglesias, y Ana Boyer.