En 1998 los venezolanos eligieron como presidente al mismo militar alzado que el 4 de febrero de 1992 intentó reventar a cañonazos y metralla la sede de la presidencia de la República y la residencia familiar del entonces presidente Carlos Andrés Pérez.En estas dos décadas y media, numerosos hechos llevan a una certeza: la supuesta revolución chavista ha sido un estruendoso fracaso que ha dejado al país en peores condiciones de como la recibió.