EscucharEl vocero presidencial Manuel Adorni anunció hoy que el Gobierno inició conversaciones con varias empresas privadas latinoamericanas para hacer una sesión de operaciones de Aerolíneas Argentinas en caso de que continúen las medidas de fuerza que lleva adelante “el gremio que conduce (Pablo) Biró y compañía”.De esta forma, la gestión libertaria le respondió a la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), que sacó ayer un comunicado en el que dijeron que presentó su renuncia el gerente de operaciones de la empresa, Gustavo García Lemos, que tiene bajo su responsabilidad toda la flota. “Una vez efectivizada esta dimisión y con esa posición acéfala, la empresa no puede volar”, agregaron.CONFLICTO AERONÁUTICO: ATE ANUNCIÓ UN PARO QUE AFECTARÁ A 27 AEROPUERTOS Y DOS GREMIOS SE REÚNEN ESTE JUEVESDe acuerdo con fuentes del sector, esa renuncia está fechada al 30 de septiembre. Es decir, que si el 1 de octubre no hay reemplazante para García Lemos, cesarían las operaciones de Aerolíneas, según su versión. La empresa, en cambio, asegura que no existen ese tipo de plazos.Fabián Lombardo, el CEO de la compañía, está buscando reemplazante, pero el sucesor tiene que ser piloto. Y si es piloto en funciones, es afiliado a APLA, el gremio de Biró, que es quien le pidió la renuncia al actual gerente. La única opción sería buscar reemplazante entre pilotos retirados, una posibilidad que habilita la normativa de la Administración Nacional Aviación Civil (ANAC).La renuncia del gerente de operaciones fue una respuesta del sindicato a la decisión de la empresa de echar a tres pilotos el 12 de septiembre pasado porque no devolvieron un avión. Antes, desde Aerolíneas habían anunciado que iban a buscar desplazar a Biró del directorio porque su accionar le hacía perder dinero a la empresa. Ayer, también lo denunció el Ministerio de Seguridad que maneja Patricia Bullrich.En este punto, el reclamo salarial ya es casi anecdótico. Los pilotos están pidiendo una recomposición salarial de entre el 25 y el 70%, cuando la empresa ofrece un 11% en línea con el aumento de los empleados estatales. Dos de los cinco gremios con presencia en la empresa ya acordaron: la Unión del Personal Superior y Profesional de Empresas Aerocomerciales (UPSA) y la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA). Quedan APLA, los Aeronavegantes, con otro duro a la cabeza que es Juan Pablo Brey, y la Asociación del Personal Aeronáutico (APA).Los camioneros Omar Pérez y Pablo Moyano con los dirigentes aeronáuticos Pablo Biró y Juan Pablo BreyDelegar la operación de Aerolíneas en otra empresa, como dice el Gobierno, sería casi imposible. Venderla tampoco es una opción porque la empresa quedó fuera del paquete de empresas públicas privatizables de la Ley de Bases.Sin embargo, desde el Gobierno insisten en que si el conflicto sigue, en 72 horas darán a conocer los nombres de los interlocutores interesados en la compañía. Hace unas semanas, habían trascendido de una fuente de la industria los siguientes: Avianca, Latam, Germán Efromovich (ex Avianca) y un grupo nacional que incluye agencia de viajes, hoteles y transporte con un socio de Europa. También Azul Líneas Aéreas podría sumarse a la lista de interesados.Latam negó hoy ser parte de cualquier tipo de conversación y Avianca sostiene que no cuenta con información oficial más allá del entendimiento comercial que firmaron con Aerolíneas Argentinas hace unos meses. Esta historia continuará.María Julieta RumiSeguí leyendoLos argentinos son “bien vistos”. El país europeo que pasó de no tener infraestructura básica a ser un “paraíso digital”Invirtieron 100.000 euros. El plan de negocios de dos odontólogos argentinos que es un éxito en EspañaApto blanqueo. Los activos más recomendados (y los menos) para invertir los dólaresTemasComunidad de NegociosAerolíneas ArgentinasConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectOtras noticias de Comunidad de NegociosDólar. El MEP perfora los $1200 y el riesgo país cae a su valor más bajo en cuatro mesesVientos fuertes. Suspendieron la jura de una exposición ganaderaEl futuro de Aerolíneas. Seis claves para entender el conflicto y la nueva jugada de Milei