EscucharEl grupo Invertir en Bolsa (IEB), un holding de empresas financieras con presencia en la bolsa local y en mercados internacionales, anunció un programa para promover la educación financiera entre alumnos universitarios y facilitar el acceso a herramientas de inversión. Mediante un desembolso que podría ascender a $200 millones, la iniciativa fue lanzada a partir de un acuerdo con el gobierno de la ciudad de Buenos Aires.Para Juan Ignacio Abuchdid, CEO y fundador del grupo, que registra una facturación anual cercana a los US$100 millones, el negocio en torno de las inversiones y las finanzas personales se consolidó desde el inicio de su carrera en una obsesión. “Siempre quise llegar al inversor pequeño, pero cuando empecé a trabajar en el tema, hacia 2010, me di cuenta que era imposible: necesitaba cientos de miles de clientes para que fuera rentable, y necesitaba una tecnología superlativa, que le permitiera al usuario aprender y autogestionar sus inversiones. Para 2015, hice la primera incursión e invertí US$300.000 en una app, pero decidí no lanzarla porque no estaba a la altura: IEB administra US$2.500 millones y tiene como clientes a las más grandes compañías; tiene una imagen y una reputación que cuidar”, explicó el especialista en diálogo con LA NACION.Posteriormente, Abuchdid dio con un equipo de desarrolladores exGlobant que entendió lo que buscaba y, tras una inversión superior a US$1,5 millón, lanzó este año su billetera virtual. En el marco de este plan, la empresa también concretó la adquisición de Gallo Digital Solutions, desarrolladora de soluciones digitales para la mayoría de las casas de bolsa de la Argentina, a fin de apuntalar la calidad de su servicio.Una herramienta contra la pobrezaPara Abuchdid, la educación financiera es una herramienta cuya importancia no es aún suficientemente valorada. “Si todo el país tuviera educación financiera, se acabaría la pobreza en la Argentina”, remarcó.En esa línea, graficó: “En el país, hay US$400.000 millones afuera del sistema financiero, de los cuales US$200.000 millones están debajo del colchón. Una persona inteligente financieramente invierte ese dinero a una tasa de interés promedio del 5% anual, mientras que otra persona lo deja bajo el colchón. Luego de 20 años, esos US$200.000 millones se transforman en un trillón, equivalentes a dos PBI. La persona inteligente representa un país con un 5% de pobreza; la otra, a la Argentina, con un 50% de pobreza”.Asimismo, de acuerdo con Abuchdid, el mercado de capitales se consolida como motor de la economía, en tanto las inversiones se traducen en financiamiento para las empresas. “En cualquier economía próspera, el mercado de capitales está desarrollado. En la Argentina, representa entre el 1- 2% del PBI, mientras que en otros países de la región -como Chile, Brasil, Uruguay y Colombia-, el 30-40% del PBI; y en países desarrollados, arriba del 100%. En otras palabras, nuestro mercado de capitales tendría que crecer 50 veces”, aclaró.Entre la desconfianza y el desconocimientoLas razones detrás de la dinámica del mercado son claras para el especialista. “Todas las personas sabemos que la inflación en dólares existe. Pero en los últimos 30 años hubo reiterados ‘delitos financieros’ -como el ‘corralito’, el ‘plan primavera’, el ‘plan Bonex’, y el default- que llevaron a que todos dijéramos ‘basta’. Cada vez que el país se encontraba en problemas, la decisión del Banco Central y del político de turno era manotear el ahorro privado”, cuestionó.No obstante, también consideró que hoy el país se encuentra en un momento bisagra. “Todas las causas de manoteos de ahorros privados por default tuvieron un solo origen: el déficit fiscal. En tanto tomemos conciencia que el déficit fiscal es inviable, porque no podemos gastar más de lo que ingresa, no habrá manoteo de ahorros privados y paulatinamente se perderá el miedo a invertir. La confianza no se recupera automáticamente”, explicó.Según un reciente relevamiento de Bolsas y Mercados Argentinos (ByMA), el promedio mensual de cuentas con operaciones (activas) registradas en la Caja de Valores creció un 186% durante el primer semestre 2024, en relación al mismo período del año anterior. De acuerdo con el reporte, la tendencia está vinculada a la modificación de expectativas que el cambio de Gobierno provocó.En paralelo, Abuchdid también aclaró: “Si las personas tuvieran conocimientos de educación financiera, entenderían que con un click pueden acceder a un T-Bill de Estados Unidos. Entenderían que no es lo mismo tener bonos del Estado soberano que bonos de una compañía argentina; o que no es lo mismo tener acciones que un plazo fijo. Hay un trabajo muy grande por hacer. Cuando le preguntás a un argentino qué es invertir, responde dos cosas: comprar dólar Mep -que por definición no es una inversión- o hacer un plazo fijo. Tengo 41 años y quiero que cuando llegue a los 50, al menos 5 millones de personas hayan ingresado al mercado de capitales”. Las razones, según el especialista: el impacto de la educación financiera es superlativo y se traduce en una mejor calidad de vida.“El mercado de capitales no es timba”A la hora de analizar el comportamiento entre los jóvenes, Abuchdid detectó dos situaciones que catalogó como “preocupantes”. Por un lado, identificó el mercado de criptomonedas, “que funcionó como un evangelizador y que representa el riesgo máximo”. “Es como comprar acciones de una startup, una firma que recién está comenzando y con un futuro incierto. Hay más cuentas de criptomonedas que en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires entre los argentinos, pese a que la BCBS tiene más de 150 años y el mundo cripto solo 10″, indicó.Por otro lado, el especialista señaló también la proliferación de las casas de apuestas. y apuntó: “Invertir no es apostar criptomonedas. Muchos jóvenes tienen hoy problemas con la timba, por lo que esta es una buena oportunidad para educar sobre el tema. ¿El mercado de capitales es timba? No. El mercado de capitales implica ser inteligente y pensar a largo plazo. Mientras antes arranquen, antes verán los beneficios, por más mínima que sea su capacidad de ahorro”.Ante este escenario y mediante el programa de formación lanzado recientemente, IEB propone a los estudiantes incursionar en finanzas. La iniciativa consta de un primer encuentro presencial de introducción al mercado de capitales y de dos clases virtuales, a cargo de Norberto Sosa, director de la compañía, en las que se evalúan los instrumentos de renta fija y variable y se realiza un porfolio de inversión. Para ello, además, el programa contempla la entrega de un bono de $10.000 a cada estudiante para que comience a invertir. A la fecha, mediante acuerdos con tres universidades, más de 1000 estudiantes ya participaron del curso.Laura PonassoSeguí leyendo“Al comienzo nadie me entendía”. El italiano que apuesta por el país con una antigua técnica decorativa”No es para probar suerte”. Cómo viven los emprendedores argentinos en RusiaTiempo de quedarse quietos. La inversión ganadora es la que menos se rotaTemasComunidad de NegociosFinanzas para emprendedoresFinanzasConforme a los criterios deConocé másOtras noticias de Comunidad de Negocios“Nos vamos a quedar sin estación experimental”. Revivió una ofensiva para evitar la cesión de tierras del INTA en SaltaAnuncio oficial. El Gobierno revisará contratos con las telefónicas y pondrá a disposición del mercado espectro 5GEl caso de Gualeguaychú. Ex-miembro de Ráfaga, cercano a Karina Milei y delfín de la “motosierra” entre los intendentes