La crisis energética internacional aceleró proyectos de inversión en fuentes alternativas de energía. Este año, la gran vedette de los inversores es el hidrógeno verde, que se produce separando las moléculas de agua (H2O) en oxígeno (O2) e hidrógeno (H2) mediante electricidad (electrólisis), generada a partir de fuentes renovables. La Argentina tiene potencial en este tipo de producción porque cuenta con las condiciones naturales para generar energía solar y eólica, ya que la electricidad es el insumo principal de la producción de hidrógeno.El año pasado, la empresa australiana Fortescue, que tiene al exrugbier Agustín Pichot como presidente para la América Latina, anunció que invertirá US$8400 millones para instalar una planta de hidrógeno en la provincia de Río Negro, aunque todavía no hay mayor información sobre ese proyecto.DÓLAR BLUE HOY: A CUÁNTO COTIZA EL VIERNES 27 DE MAYOAhora se sumó otra compañía internacional interesada en el país. Se trata de la empresa estadounidense MMEX Resources Corporation, que anunció ayer una inversión de US$500 millones para instalar en Tierra del Fuego una planta de electrólisis que permitirá obtener más de 55 toneladas de hidrógeno por día. Se le dice que será “verde” porque para generar la electricidad se construirá un parque eólico de hasta 300 MW (160 MW base) en la ciudad de Río Grande.“El objetivo será desarrollar una unidad de conversión de amoníaco o metanol de 300 toneladas diarias para exportaciones globales, que se realizarán a través de una infraestructura de carga marítima propia”, explicó Nabil Katabi, gerente de Financiamiento de proyectos de MMEX Resources Corporation.La construcción del parque eólico se hará a través de un acuerdo tecnológico con la compañía alemana Siemens. Actualmente, se está en la etapa de análisis técnico para dimensionar el parque eólico, que podría durar entre 90 a 120 días. La construcción del parque y de la planta de electrólisis podría durar entre dos y tres años, por lo cual, recién en 2025 se podría estar produciendo hidrógeno verde en el sur argentino.“La planta de hidrógeno estará frente al mar y se va a exportar directamente desde Tierra del Fuego. El hidrógeno se transforma en amoníaco o metanol, que son productos que tiene mucha infraestructura de transporte en el mundo, y que se pueden utilizar para fertilizantes o como combustibles en centrales eléctricas”, explica el francés Katabi, que vive en Perú hace 20 años, donde llegó de la mano de la empresa estadounidense, que ha construido y operado plantas termoeléctricas, oleoductos y gasoductos, refinerías de petróleo y plantas de etanol en ese país.“La instalación de esta planta fue pensada estratégicamente por MMEX, gracias a todas las condiciones naturales que reúne Río Grande. Desde su ubicación, que permite la conexión con los océanos Pacífico y Atlántico, y su potencial acceso a diferentes mercados, hasta las condiciones de viento que permiten la generación de energía eólica óptima”, explicó.El proyecto prevé la creación de 1500 puestos de trabajo durante la construcción y hasta 300 puestos fijos de trabajo calificado, en la etapa de operaciones. En cuanto al cuidado ambiental, explicaron, se definirán los lineamientos base previo a la inversión, incluyendo el estudio de las rutas migratorias de las aves y el uso del recurso hídrico.Qué es el hidrógenoEl hidrógeno se utiliza en el país en la industria química, para la producción de fertilizantes y en la refinación de petróleo. “Se produce a partir del gas natural, mediante un proceso de reformado de metano con vapor, o a partir de la gasificación del carbón. La producción de hidrógeno verde se considera un proceso limpio, ya que solo requiere de materia prima, agua y gran cantidad de energía eléctrica”, explica Julieta Rabinovich, analista de energía en la consultora de GME Group.En la Argentina (y el mundo en general) se genera el hidrógeno gris (a través del reformado de vapor de gas natural) y el azul, que es el mismo proceso que el gris, pero se captura el dióxido de carbono (CO2) en lugar de ser emitido a la atmósfera.“El uso de los combustibles ha ido evolucionando cada vez con más hidrógeno y menos carbono. En la medida en que se pueda producir hidrógeno en forma económica irá reemplazando al gas natural, al petróleo y al carbón, porque produce más energía por kilogramo que cualquiera de los otros. Por lo tanto, la eficiencia es mayor y la contaminación es mucho menor, porque cuando se usa libera agua, que es bastante afín al ser humano, distinto al dióxido de carbono que nos mata hoy en día”, explicó Eduardo Hadad, profesor asociado en la Universidad Nacional Arturo Jauretche. Y agregó: “Es racional pensar que en 20 años el combustible principal será el hidrógeno; no quiere decir que los otros no se pueden utilizar, pero serían utilizados en condiciones particulares”.Sofía DiamanteTemasComunidad de NegociosActualidad económicaConforme a los criterios deConocé The Trust ProjectOtras noticias de Comunidad de Negocios”En lo que saben”. Por la inflación, una inversión se consolida como “reserva de valor” para los ganaderos“Discriminación fiscal”. La cadena que más dólares genera le hizo varias advertencias al GobiernoVacunos. El valor de la hacienda trepó un 11,15% en el Mercado Agroganadero de Cañuelas