El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ha condenado a España por haber vulnerado el derecho a la libertad de expresión de un sindicalista gallego, que fue considerado autor de un delito de ultraje a la bandera. El hecho ocurrió en 2014, durante unas protestas frente al Arsenal del Ferrol (A Coruña), motivadas por las condiciones laborales y los retrasos en el pago de salarios a los trabajadores que prestaban servicios en estas instalaciones militares. Coincidiendo con el izado de la bandera, el sindicalista en cuestión, Pablo Fragoso, se dirigió a los congregados utilizando expresiones como “aquí tenéis el silencio de la puta bandera” o “hay que pegarle fuego a la puta bandera”.Seguir leyendo