Patricia Pérez, jefa de prensa de la selección femenina de fútbol, sale de la Audiencia Nacional este jueves, donde acudió a prestar testimonio por el caso Rubiales. (EFE/ Javier Lizón) (Javier Lizón/)Larga mañana en la Audiencia Nacional. Ante el juez del caso Rubiales han declarado en calidad de testigos el exdirector de Integridad de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Miguel García Caba, y la jefa de prensa de la Selección femenina, Patricia Pérez. Mientras, el hermano de Jenni Hermoso, Rafael, ha acudido a sede judicial para entregar su teléfono móvil, cuyo contenido será analizado por el juez tras haberle tomado declaración el pasado lunes, cuando confirmó las coacciones que recibió por parte del entorno de Luis Rubiales tras el beso a su hermana.La misma diligencia de investigación ha acordado el magistrado Francisco De Jorge tras escuchar la declaración de la todavía jefa de prensa de la Selección campeona del mundo. Tras comparecer ante el juez, Patricia Pérez ha entrado en el edificio principal de la Audiencia Nacional para poner a disposición del juzgado su teléfono móvil, han informado fuentes jurídicas.Te puede interesar: La Guardia Civil registra la RFEF en busca de documentación para el caso Negreira con el FC Barcelona imputado por cohechoPérez y Caba han comparecido en calidad de testigos, la misma condición que tenían en la causa hasta este miércoles el director de la Selección masculina, Albert Luque, y el director de Marketing de la RFEF, Rubén Rivera. Ambos también estaban citados inicialmente para este jueves, pero el juez De Jorge les imputó horas antes el delito de coacciones a tenor de los testimonios de Rafael Hermoso y una amiga de la futbolista, quienes confirmaron las presiones sufridas por el entorno de Hermoso por parte de algunos representantes de la RFEF.En concreto, a Luque se le acusa de ponerse en contacto con allegados de Jenni Hermoso para presionarla para que dijera que el beso de Rubiales fue consentido, así como de acudir a Ibiza, donde las futbolistas celebraban la consecución del Mundial. Las jugadoras también señalaron a Rivera, quien presuntamente medió en las coacciones a Hermoso y era la cara visible de la Federación en Ibiza.Te puede interesar: Un alumno de 14 años apuñala a dos estudiantes y tres profesores en un instituto de Jerez: “No es un chico problemático, pero está siempre solo”El lunes, turno de las jugadorasDe Jorge también imputó por un delito de coacciones al exseleccionador femenino Jorge Vilda, quien habría pedido al hermano de la futbolista que ella declarase públicamente que dio su consentimiento al expresidente de la RFEF.Las próximas en desfilar por la Audiencia Nacional serán Alexia Putellas, Irene Paredes y Misa Rodríguez, tres pesos pesados del vestuario de la Selección y las futbolistas más allegadas a Jenni Hermoso. Comparecerán el próximo lunes como testigos solicitados por la representación de la víctima. Se prevé que Putellas y Paredes declaren por videoconferencia, mientras que Misa Rodríguez podría acudir de forma presencial.Esta batería de citaciones llegan tras la primera declaración de Rubiales ante el juez De Jorge, quien le impuso una orden de alejamiento de 200 metros respecto a la víctima, con la que también tiene prohibido comunicarse por cualquier medio durante la instrucción de la causa. La teniente fiscal de la Audiencia Nacional, Marta Durántez Gil, solicitó como medidas cautelares para Rubiales una orden de alejamiento de 500 metros, la prohibición de las comunicaciones con la futbolista y la obligación de firmar en el juzgado cada 15 días.